Nirvana
| Según el Hinayana, el Nirvana equivale a la concepción de que nada existe. El hombre que sabe que no es ha alcanzado el Nirvana; el vasto universo astronómico no es menos irreal que ese hombre. Quien se confunde con los otros y con todo otro ya ha logrado la meta. El Budismo niega la conciencia y la materia, el objeto y el sujeto, el alma y la divinidad. El proceso cósmico es un sueño sin soñador. Detrás del sueño y bajo el sueño no hay nada. El Nirvana es la única salvación. El hombre sigue viviendo tras esta revelación como quien sueña y sabe que sueña y deja fluir el sueño. Como el hombre de ojos enfermos no ve una luna sino dos, pero sabe que hay una, así el hombre salvado sigue percibiendo el mundo sensorial pero sabe que es falso.
Para él, una bizna de paja es como una joya... un manjar, como el barro; un himno de alabanza, como una injuria; el dia, como la noche; lo visto, como lo soñado; la madre, como una perdida; el placer, como el dolor; el cielo, como el infierno; el mal, como el bien.
Chiang Tzu (el fundador del Budismo Zen) soñó que era una mariposa y no sabia, al despertar, si era un hombre que habia soñado ser una mariposa o una mariposa que ahora soñaba ser un hombre.